lunes, 26 de octubre de 2009

Renault Mégane RS

Para amantes de fuertes sensaciones


- 250 CV, seis velocidades y diferencial autoblocante.


- Su precio desde 26.450 euros, siendo la opción más interesante el chasis CUP por 2.600 euros.





Juan Carlos de Felipe

Acabo de probar el nuevo Renault Mégane Renault Sport por los alrrededores de Málaga y Ronda, por carretera muy buenas y rápidas, pero además he tenido el placer de probar todas las bondades de este coche en el Circuito de Ascari, todo un lujo.

Estamos ante un digno sucesor de la exitosa gama Mégane Renault Sport (RS) y es el sexto modelo de la nueva gama Mégane en el mercado. El coche se fabricará en Palencia, siendo su fecha de comercialización el próximo diciembre y junto con Suiza, España será la primera en comercializar este vehículo en todo el mundo.
La marca nos decía que este coche, en principio, es elegante y en segundo lugar deportivo. Sin querer molestar con esto, no estoy del todo de acuerdo, para mi estamos ante uno de los vehículos más deportivos que Renault ha fabricado en serie para el publico en general y su aspecto es radicalmente “RACING” como debe ser, sí señor.
Además con el fin de cumplir con las expectativas de todos los clientes, el nuevo Mégane RS dispone, desde su lanzamiento, de una doble oferta de chasis: Sport, para el placer de conducir a diario y Cup, para un rendimiento aún mayor, especialmente en circuito.
El ambiente interior recoge el espíritu deportivo del diseño exterior con una armonía que conjuga el color carbono oscuro con unos toques Amarillo Sport en la esfera del cuentavueltas y en las costuras del volante. El Pack Ambiance Amarillo aporta un toque adicional de color a los cinturones de seguridad, a la tapicería (con dos tonos de amarillo) y a las costuras de los paneles de puerta y del pomo de la palanca de velocidades. Pero la gran novedad está en el Renault Sport Monitor, que es una herramienta útil y eficaz de ayuda a la conducción deportiva porque transmite la información en tiempo real. Directamente inspirado en la tecnología de la competición, este tipo de herramienta estaba reservado hasta ahora a algunos modelos deportivos exclusivos, como el súper Nissan GTR.

El motor, la clave
Por supuesto, una de las mayores ventajas de Mégane RS se encuentra debajo del capó: un motor de 2.0 16v turbo (F4Rt) de nueva generación, homologado Euro 5. Desarrolla una potencia de 250 CV a 5.500 r.p.m., un par de 340 Nm a 3.000 r.p.m. Este aumento de potencia y de par se debe sobre todo a un turbo más grande, un árbol de levas de admisión variable y una cartografía de inyección revisada. Más del 25% de las piezas son nuevas con respecto a la versión 230 CV montada en el Mégane F1 Team R26, lo que permite garantizar rendimiento y fiabilidad.
Y para sacarle todo el rendimiento posible, el Mégane RS con chasis Cup adopta un diferencial mecánico helicoidal dentado con función de deslizamiento limitado. Durante las fases de patinado, la arquitectura interior del diferencial genera rozamientos en las distintas superficies de los planetarios, transmitiendo una parte del par motor a la rueda más adherente.

lunes, 5 de octubre de 2009

Prueba Nissan GT-R

YA LO HE PROBADO ... IMPRESIONANTE

Lo he conseguido, ya puedo decir que he probado el nuevo Nissan GTR. Para un vehículo de esta categoría debíamos buscar un lugar acorde con él, la elección del lugar de la prueba era claro, el Circuito de Maspalomas y gracias a Miguel Ángel Domínguez y al Sr. Macias, todo fueron facilidades, gracias.
Se ha dicho y escrito mucho sobre el GT-R R35 y ahora puedo decir que todo es verdad, estamos ante un vehículo de competición con el que se puede circular por la calle y por decirlo de otra manera, lo mejor del mercado. Su relación precio, prestaciones, equipamiento y exclusividad es imbatible.

Enamora nada más verlo, se puede decir que atrae a primera vista, si diseño robusto y agresivo insita a conducirlo al límite. Tiene todo lo necesario para volver la cabeza del más escéptico del mundo del motor, nadie queda indiferente al GT-R, es prácticamente imposible.


485 CV
Todo deportivo que se precie debe tener un potente motor y el GT-R R35 dispone de un nuevo V6 de doble turbo que desarrolla una potencia de 485 caballos y un par motor de 588 Nm (el de un camión) con la calificación de emisiones ultra-bajas, según la normativa japonesa, que combina una potencia extraordinaria con el mejor consumo del segmento. Ya hay preparaciones sobre este modelo que lo suben a 600 y 800 CV de potencia “valga me Dios”.
Pero claro, también debe transmitir esa potencia al suelo y además poder pararla cuando se necesite. Por eso la transmisión de doble embrague con paletas de accionamiento detrás del volante garantiza una velocidad excepcionalmente rápida en el cambio de relación, así como la comodidad de poder ser utilizada en modo completamente automático, sumándole el sistema de tracción inteligente. Los primeros modelos tuvieron algún problema en la transmisión cuando se desactivaban algunos sistemas, por ese motivo Nissan ha montado una transmisión más robusta aún. Nissan ofrecerá a todos los usuarios de la primera versión una actualización gratuita de la transmisión y de la programación del control de salida lanzada para equipararlo con las unidades que se comercializan ahora mismo.
Pero claro ahora tenemos que parar este misil con ruedas. Para ello están los discos perforados Brembo de 380 mm y pinzas de seis pistones para el tren delantero, que ofrecen enormes prestaciones de frenado para los 1.800 kilos que pesa el GT-R.

Pantalla multifunción
La pantalla central se puede cambiar al gusto o exigencias de cada uno, pudiendo visualizar todas las temperaturas y presiones necesarias para tener bajo control el motor y la caja de cambios. Hay cuatro pantallas diferentes que podemos utilizar y personalizar, para de ese modo podernos sentir como cualquier preparador. Pero ahí no acaba la cosa, además dispone de sensores de aceleración lateral y longitudinal, e incluso puede mostrar el grado de utilización de los pedales de freno, acelerador y el ángulo de la dirección, sin olvidar la fuerza G de gravedad, impresionante.

Un GT-R que hará historia
Este es el primer GT-R pensado para el mercado global en la historia de la saga que se inició en 1969 con el PGC10 GT-R. Antes los GT-R como el R32, R33 y R34, se vendieron en exclusiva en Japón y EE.UU. Durante el proceso de diseño, se trabajó para dar a este coche una presencia contundente que le señalara como fiel representante de la cultura japonesa del automóvil. Es por esta razón que la carrocería no deriva de la de ninguna berlina o coupé ya existente, lo que supone algo inédito en la saga GT-R. Esta es una de las más importantes apuestas en la redefinición del nuevo GT-R.

Sensaciones
Es difícil poder plasmar en negro sobre blanco, las sensaciones que me ha transmitido el Nissan GT-R, pero voy a intentarlo. En principio, todo es fácil, o mejor dicho el coche te deja que tú controles todo “eres el conductor”. Pero cuando cambiamos los parámetros y nos disponemos a sacar todo el partido al coche, la cosa cambia. De repente tenemos a nuestra disposición 485 CV y sólo los neumáticos nos complican en algún momento nuestros excesos. La estabilidad es a prueba de “casi” todo, prácticamente imperturbable, las suspensiones, las llantas de 20 pulgadas, la transmisión a las cuatro ruedas, las posibilidades de cambios en la electrónica de motor, cambio y controles de estabilidad, hacen muy difícil complicarnos las vida. Ahora bien, sí queremos sacarle “todo – todo” hay que tener un buen nivel de pilotaje para aprovechar su potencial, donde sólo los neumáticos ponen el límite de estabilidad. En cuanto a los frenos vamos sobrados en cualquier circunstancia, en honor a la verdad habría que rodar mucho con él para encontrar el punto exacto de frenada, siempre me sobraban unos metros.
En definitiva uno de los mejores coches, que con dinero podemos comprar y en el que a cada metro aprendemos lo que puede hacer un vehículo, cuando de manera inteligente se le aplica toda la tecnología disponible en el mercado, es imbatible.